viernes, 22 de febrero de 2019


16 de Febrero de 2.019....

 Salir en estas fechas a Teruel, siempre tiene el riesgo de pasar frío, pero, lo de esta escapada, fue brutal...


 Empezamos como siempre, a las 6.00h en la gasolinera, llenando depósito, y ya me están esperando Raúl, (GS700), y Paco, (Himalayan 400),  (Karakoles, Amigos de la Ruta Perfecta, http://www.rutaperfecta.com/), que precisamente, con Paco fue con quien descubrí el formato de ruta secreta que tanto utilizo...., además, también está con ellos Sergio RZ, (Tracer 900), y Vicente y Delia, (GSR750).

 Salimos a buscar al resto en Orito: Fernando, (Vstrom 650), Juanma, (RT1200), Alfredo, (R850R), Pive y Carmen, (Bandit 650).

 Las primeras risas, un rato charlando, y empezamos la ruta.

 El frío empieza a caer en picado antes de llegar a Almansa, (Albacete), son las 7.30h, y ya estábamos a 0º...(, -2.5º en la moto de Juanma, que me fío más del termómetro de la BMW...).

 El frío nos cogió poco a poco, grado a grado, mientras íbamos haciendo kms sin parar por la autovía, y aún así, todos bien preparados, lo llevábamos bien...
































La primera parada del día.


Otra sana tradición...


La mañana es espectacular...,



el día empieza a romper perezoso por el horizonte,



y el frío no deja de apretar.



Pero, un momento de relax...



Con Juanma, Fernando y Alfredo, (de izq. a der.).



Hasta que nos alcanzó la niebla.



La vimos llegar.



Y aún así, nos sorprendió por su velocidad, y como siempre, por su silencio denso y opresivo.



En consecuencia, no quedaba otra: teníamos que seguir.



Cortamos la charreta y las risas, y seguimos haciendo camino.

 Y en esos pocos kms, nos paso a todos algo totalmente nuevo..., en medio de la niebla, de repente, veo las gotas que se acumulan en la cúpula, pero, en lugar de "volar" hacía atrás, están quietas..., congeladas. Al igual que en los espejos, en la parte inferior de los mismos, en las manoplas..., e incluso en la visera del casco. Al tocarla, noto que esta rugoso, y cuando la bajo, no veía nada: totalmente una placa de hielo gruesa....

 Por lo que no quedaba otra, a -5º, y con las viseras levantadas, notando como el frío castiga sin piedad los pómulos de la cara..., hasta llegar a Jarafuel, Valencia, que ya despejó la niebla, salió el sol, y todo cambia de color.



Lo mejor del sitio: el aparcamiento.



Ya quedaban pocos restos del hielo en marcha.



Aún así, algo quedaba.



Y una vez más, cualquier viaje puede sorprenderte una vez más, aunque pienses, que ya lo has visto todo.



 El termómetro analógico de Alfredo..., la vieja escuela nunca falla.

 Como siempre, teníamos previsto una parada corta, pero, después de tanto frío, que menos que un poco de calma, almorzar algo caliente, y un poco de relax.

 El tiempo a partir de ahí fue genial, mucho sol, y temperatura primaveral espectacular:



Repostando en El Pontón, Valencia. De izq. a der: Fernando, Vicente, Sergio RZ, Seigen, Delia, Carmen, (su primera ruta en moto....), Pive y Raúl.

 Continuamos, o mejor dicho, empezamos lo bueno de la escapada: la zona intensa:



Chera, Sort de Chera, y Chulilla...

Y paramos en el mirador:



 Pive y Carmen: los dos "enamoraos"....



Este puerto esta vez se me hizo muy corto..., o las otras dos veces, me pareció más largo...


Y las curvas, no habían hecho más que empezar...













Evitamos Losilla, la última vez ya lo pasamos mal por el estado de la carretera...., y como no podía ser de otra manera, cogimos un tramo de carretera cortado por obras. Aún así, vimos que entraban y salían coches, y nos metimos también. Y tras un pequeño tramo por la N-330, fuimos a comer al restaurante El Salón, Riodeva, Teruel, donde Pedro, el dueño, aún estando el solo para todo el comedor, tiene un trato exquisito con todos nosotros.


Arroz al horno.

 Y las alubias pintas..., un clásico.

 No obstante, ya quedamos con Pedro, que para la siguiente vez, nos prepara algo nuevo, para cambiar un poco.

 Y por una vez, llegamos a comer a las 13.30h..., le extraño hasta a mí mujer..., jajajaja.

 Después de comer, con mucha calma, y la temperatura empezando a bajar otra vez, vamos casi directos a Ademuz, Valencia, al hotel Casa Domingo:

 Llegamos a las 17.00h, descargar en la habitación, ducha caliente, y momento de relax, para quedar a las 18.00h para ver el pueblo.


La Himalayan 400 de Paco.


Paco y Raúl se fueron a aprovechar la tarde haciendo pistas, y descubriendo la Rambla del agua. Una pista que es el cauce con agua constante.


Vicente y Delia fueron de vuelta a Riodeva, o exactamente, al poblado minero abandonado pocos kms antes de llegar.


Me lo apunto para la próxima vez...


Casa cueva de museo.



Y una historia interesante sobre la mina de azufre abandonada en 1.956, (creo recordar...).


Vicente disfrutó con la fotografía.


Buen recuerdo.


Y les dio tiempo a llegar a Ademuz antes de los cogiera la noche.

 Juanma y Alfredo en el hotel tomando algo frío... 
Pive y Carmen se quedaron descansando. Teniendo en cuenta que era la primera vez que Carmen se subía a una moto, y el día tan intenso que llevaba encima, desde el frío intenso de primera hora, a las horas de curvas intensas a buen ritmo hasta la comida..., tuvo merito.

Y solo quedábamos Sergio Rz, Fernando y yo:

Fernando hizo la foto:

Ademuz, un pueblo que sorprende por dentro.

Literalmente, nos perdimos por sus estrechas y empinadas calles...
Detalle del campanario. 

Entre escaleras y pendientes...
 Costo llegar arriba..., y hasta vimos le hotel:
Merece la pena la subida. 




Juanma y Alfredo también llegaron arriba, y tuvieron su merito, las calles eran un puzzle increíble de callejuelas y pendientes de cualquier manera.

Hubo tiempo para todo...
Haciendo tiempo para que llegaran todos, el hotel tiene mucha tradición con grupos y moto clubs, y este detalle, de Los Gripaos...



La cena, el mejor momento de los viajes...

Momento "happy" con Alfredo como protagonista...

Domingo 17 de Febrero.

Por la noche la temperatura bajo a -6º, y por la mañana, todavía estábamos a -3.5º....

Y las motos, estaban con algo de hielo encima...
La Vstrom de Fernando...

 La moto de Alfredo

 La de Pive....


Y la Tracer de Seigen.


Como es lógico, dejamos mucho tiempo los motores ronroneando tranquilos y satisfechos antes de salir...


A las 9.00h desayunamos, y los que faltan, estaban fuera:


Teníamos la opción de desayunar, y también, de ir a la "matanza"...


El río al lado, carne recién cortada y a la brasa..., demasiado para unos cuantos a las 9.00h, pero, ideal para la mayoría del grupo.

La verdad, levantados más temprano, y este almuerzo a las 10.00h, hubiera sido lo máximo...


La compañía, ruta, paisajes se disfrutan..., pero, la máxima de que ningún motero pase hambre..., nunca puede faltar.
Hasta que llegaron los autocares con los jubilados...
Buena pinta tenía todo... 


Como no podía ser de otra manera..., el Armagedon...., y Juanma, Alfredo, Raúl, Paco, Vicente y Delia tuvieron que dejar hueco a las  generaciones pasadas.

Al final, como estaba previsto dentro del margen de lo posible,

(izq. a der. Sergio RZ, Carmen y Pive).
 tras desayunar, almorzar y respostar, podemos seguir haciendo camino a las 10.20h...


La ruta de esa mañana era con margen para ir tranquilos, aún así, los tramos de la N420 nunca defraudan, y el ritmo fue muy bueno, sobre todo, cuando empezamos a enlazar curvas sin parar...



Parada técnica en medio de la nada..., la mayoría sin cobertura para poder llamar a la familia.

Después de esta parada, fue el mejor tramo del fin de semana, y eso, teniendo en cuenta, que el sábado fue muy intenso de curvas, tiene su merito.

Tramos con cambios de rasante que daban miedo, carreteras estrechas y reviradas que son las mejores, baja velocidad, pero, constantemente la moto de lado a lado, almendros en flor que cada vez son más difíciles de ver, y de repente..., se termina el asfalto.

 No estaba previsto..., y Paco, Raúl y Juanma se ofrecen a ir de exploración para ver sí hay salida, y sí el tramo de pista lleno de piedras es corto.

Afortunadamente son apenas 80 metros..., y después un tramo de carretera rota, (por peores sitios hemos pasado...), y en apenas 27 kms, nuestro próximo destino:



Estos puentes "a pelo" sobre los ríos..., de cemento, y ya, tienen su encanto.

Y tras el tramo aventurero de la pista, llegamos a comer a las 13.40h, muy buena hora...

El restaurante El Cruce, de Las Eras, muy cerca de Alcalá del Júcar, con su parking particular.


Es diferente llegar con el grupo pronto a comer...


Como era de esperar, los de la "matanza" casi no pudieron comer..., estaban llenos.



Si embargo el buen ambiente y las risas nunca pueden faltar.


Después de comer, la mayoría directos a casa.


Pero, Raúl, Paco, Vicente y Delia se animaron a ir al "Túnel del Molinar", que estaba cerca, y teniendo en cuenta lo que les gusta lo marrón, (a Vicente lo veo con una trail al final...), lo disfrutaron bien:



Reconozco que me sobran ganas de ir, pero, soy muy malo con las pistas....



Y al final de la escapada, la mayoría en casa a las 18.00h..., una hora extraña, pero, muy razonable..., ya que fue un fin de semana muy intenso físicamente, y disfrutado como se merece.



Además, he dejado lo mejor para el final, el vídeo de Fernando. A partir del minuto 4.30 empieza el túnel con una curva cerrada de derechas..., dentro del túnel. Después, el tramo de pista, que una vez pasado, todo fueron risas nerviosas, pero, hasta que no lo pasamos..., no pintaba tan fácil.

Y como conclusión final del viaje, me quedo con el frío extremo del Sábado a primera hora, en claro contraste con la temperatura muy agradable del resto del fin de semana..., con esto, como a veces pasa, compensa con creces salir en estos meses en los que el calor no es lo normal.



 También es digno de mención para mí lo bien que fue Paco con su Himalayan 400, monocilíndrica, 22cvs, y que mantuvo el ritmo todo el viaje, y por supuesto, a Carmen, que para ser la primera vez que se subía en moto, 760 kms de media en dos días, tiene su merito.

 Por otra parte, hemos cambiado el sistema, llegar más pronto a las comidas, y sobre todo, al hotel, para tener margen y libertad el resto de la tarde, seguir ruteando con la moto, ir a descubrir pistas, descansar, perdernos por las cuestas interminables del pueblo, o simplemente, tomar algo en un bar. Creo que este será nuestro sistema a partir de ahora.


Y la próxima, Albarracin, Teruel, no demasiado lejos de esta, pero, por otras rutas y curvas diferentes...