Penitentes 2013. La tercera edición consecutiva... 1ª Parte de 4: Jueves 2 de Mayo, la subida.

Este año ha sido todo muy atípico..., porque, la edición del año pasado fue muy dura, y salí con la idea de no volver, pero..., como no hay dos sin tres, al final, y casi sin darme cuenta, se me calentó el bocado en Noviembre, y ya sabía que la iba a hacer este año.

Antes de salir, muchos nervios, porque, además, esta foto era del día anterior...,

 por lo tanto, íbamos preparados, por lo que pudiera pasar...

 Y con todo más o menos listo, el Jueves 2 de Mayo, empieza la aventura.

 Llego un poco tarde a la gasolinera a las 8.20h, pero, aún llegando 20 minutos tarde..., como nos suele pasar, nos liamos con las risas y el cachondeo, y acabamos saliendo prácticamente a las 9.00h, de la mañana, que nos quedan 700 kms de mucha autovía, (prácticamente todo el trayecto).

 De izquierda a derecha, Marcos, su primer viaje largo en moto, y con tan solo 6 meses en moto..., pero, su Vstrom, (mi ex-Vstrom...), ya se conoce los Pirineos.

  El tiempo nos respeta, de momento..., y repostamos por Castellón, poco antes de los 300 kms, que es nuestro margen de autonomía.

Y a aprovechar el tiempo...,

Además, es el primer viaje que hago con al Varadero, y de momento, voy más cómodo, tiene mejor protección aerodinámica, sobre todo en las piernas..., y este es su elemento, (menos mal, porque, voy más lento en zona de curvas que con mi ex-Vstrom..., jajaja).

Después, un poco más adelante, paramos un momento para almorzar algo, y paramos a las 12.00h, en Barracas, Castellón,

Seguimos haciendo camino..., y pasamos Teruel, y en la provincia de Zaragoza, paramos un momento a tomar un café, que ya estábamos fritos...

Eran sobre las 15.00h de la tarde, y encontramos el Bar Goya..., pero, cuando entramos, resulta ser el típico bar cutre de jubilados..., jajaja, pero, el café es bueno, que no es poco.

 Se agradece el descanso, y seguimos hacia delante, con la idea de prácticamente llegar a los Baños de Panticosa, al hotel, y lugar de la concentración.

 No obstante, el viento es muy molesto, y desde el almuerzo, nos esta castigando sin contemplaciones, incrementando el consumo de las motos, (antes eran 300 kms, y ahora son 265 kms...), e incrementando nuestro desgaste físico, por lo que paramos a repostar, (otra vez...), y al ir a tomar otro café rápido, vemos pasar platos de comida..., por lo que pregunto a la camarera que era eso, y me dijo que Codillo de Cordero, Marcos pregunta que sí todavía sirven comidas, le dicen que sí, y en un visto y nos visto, ya estábamos los tres sentados, sin las chaquetas, y esperando para comer. Eran las 17.30h de la tarde...

 Vistas hasta donde alcanzaba la vista desde el comedor. Eso sí, todo plano, y únicamente montañas al norte de fondo...

 Y el viento cariñoso, que no nos abandono en todo el viaje.

 Marcos, contento y feliz.

 Pedro preparándose...

Y otra vez de vuelta a la carretera, que son las 18.30h, y nos quedan poco más de 100 kms, ya que estamos en Huesca, y nos queda el mejor tramo..., con un par de curvas.

 Pero, siempre hay un pero..., cuando nos faltaban apenas 50 kms, vemos tormenta a a epenas unos kms más adelante..., y nos metemos de lleno en ella, claro, y aunque intentamos avisar a Pedro para que parara, (porque era el único que llevaba el impermeable puesto.., a pesar de nuestras risas en la comida...), no se dio cuenta, y pasamos los siguientes 30 minutos bajo una lluvia muy intensa, con granizada incluida.

 Sin embargo, después de esa media hora, el cielo se abrió, y no pudimos resistirnos a parar, y a a hacer un par de fotos...

 Porque, ya estábamos llegando, y el desafío, estaba más cerca que nunca.

Y cansados pero contentos,

y con nuestras tres maxi trails negras,

estábamos listos y preparados para lo que tenía que llegar,

Y como sonaba agua corriendo,

 no tuvimos que buscar mucho,

y de paso, relajarnos, y estirar las piernas.

 Sin olvidar el buen rollo, ambiente, y compañerismo, que como siempre, es lo mejor de nuestros escasos viajes.

Y por supuesto, nuestras motos, en su hábitat natural,

cuantos más kms mejor,

ya que el límite es nuestra resistencia física.

Lamentablemente, el tiempo se nos echaba encima,

y las horas de luz se nos estaban acabando...,

por lo tanto, unas pocas fotos más.

Y la única nota negativa de todo el viaje...,

el casco de Marcos, un HJC RPAH 10, tope de gama de la marca, (y yo tengo otro igual, pero, en blanco...), y con 30 minutos de lluvia, el pink lock, lleno de agua...

por los dos lados...

tan solo espero que la marca se haga cargo de la garantía, porque, a mi con frío, también se me empaña..., que desastre.

Pero, tenemos que seguir, en consecuencia, zumbando hacia el hotel, que la noche se nos echaba encima..., y ya había ganas de llegar, descargar las motos, una buena ducha caliente, y relajarnos un poco más...

Y por fin conseguimos llegar,

un sitio precioso, enorme, pero, de momento, no vemos el parking....,

y mientras Pedro buscaba la entrada al hotel, me entretuve haciendo unas pocas fotos....

 Sencillamente, impresionante el entorno.

Y por supuesto, las Termas..., o el SPA:

Y como ya había adelantado la organización, el dorsal, camiseta, y demás, estaba preparado. Aquí mi dorsal, 316.

y el de Marcos, 273.

 El de Pedro, no lo vi hasta poco después, ya que dormía en otra habitación, en otra planta del hotel.

Eran ya las 20.00h pasadas, cuando conseguimos llegar, desde las 9.00h..., y sobre todo, desde las 5.30h de pie, pero, aún con poca luz, se puede ver algo todavía de los alrededores del hotel...

Aunque sea desde la habitación del hotel...,

o desde el pasillo...,

y la nieve es una constante.

Y por supuesto, el hall del hotel, que lo primero que llama la atención, es la temperatura tan agradable que hay por todo el hotel, y lo segundo, el silencio..., perfecto.

No obstante, al poco de llegar, me llama la atención, la presencia de dos coches con carros, y con las motos encima..., una GS 1200, y una CBR1000RR, roja y blanca, preciosa, por lo que al dueño de esta última, me acerco y le pregunto, y así charlando, y casi sin darnos cuenta, nos presentamos todos, Paulino, y su mujer Sonia, de Cordoba, (por eso lo del carro..., y que es una RR, claro),  quedamos para cenar, coincidimos con otro compañero más, Miguel de Burgos, con una impresionante KTM 990 Adventure naranja, donde pasamos un rato muy agradable, y ya quedamos para desayunar juntos, aunque, antes de acostarnos, (23.30h aproximadamente...), dio tiempo a alguna foto más....

Y la noche llego por fin,

y aunque esa noche, la moto durmió más o menos bajo techo....,

 porque, sí, no hay parking, increíble pero cierto, todas las motos en la calle, con temperaturas de -5º..., solo nos quedaba cenar, que aprovechamos y cenamos con la organización, y más compañeros que llegaron como nosotros un día antes, ya que mañana, en teoría, era un día de relax antes de la ruta..., pero, eso sera en la siguiente parte, o el día siguiente, como cada uno prefiera...